Autor: Lic. Jacob Luelmo Salazar.

Tiempo de lectura: 7 minutos.

Diariamente las personas, organizaciones de diferentes tipos y los gobiernos de todos los países, se encuentran en la búsqueda de una solución inteligente que atienda sus necesidades de carácter financiero. En este sentido, con el fin de resolver dichos requerimientos, cada uno recurre con frecuencia a más de un servicio financiero a lo largo del tiempo. 

El ejemplo más claro de ello, es cuando una persona desea adquirir un automóvil nuevo a través de un financiamiento. Genéricamente un Banco será la institución que otorgue el crédito para la adquisición del vehículo; sin embargo, requerirá también los servicios financieros de una Aseguradora, quien será la encargada de emitir una póliza para cubrir los riesgos a los que podrá estar expuesto el bien sujeto al financiamiento, mismo que hasta no ser liquidado en su totalidad, será copropiedad del Banco. 

Ahora bien, supongamos que el Banco o la Aseguradora no esclarecieron correctamente el cobro de determinadas comisiones por sus servicios, de manera que es probable que la persona tenga inconformidades al respecto, por lo que podría proceder a presentar una reclamación. Para ello es necesario que conozca a la autoridad reguladora pertinente, que en este caso sería la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), misma que se encargará de orientarlo ante tal situación. 

Es así como en un ejemplo de la vida cotidiana, en el que podemos entender la necesidad de una cultura financiera para la población y sobre todo, del conocimiento de las instituciones que integran el Sistema Financiero Mexicano (SFM), ya que este representa uno de los principales motores de la economía nacional.

El SFM es el conjunto de instituciones organizadas e interrelacionadas que buscan establecer un orden adecuado en la asignación de recursos financieros y monetarios, es decir, se encargan de poner en contacto a la gente que tiene dinero, con la gente que lo necesita. Es por esto que asociamos de manera inmediata el concepto con un Banco, sin embargo, el SFM está formado por diversos tipos de instituciones, cada una perteneciente a 85 sectores distintos.

Para comenzar, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), junto con el Banco de México (Banxico), son los órganos reguladores de mayor jerarquía dentro del SFM, ya que ambos son responsables de procurar la integridad, solidez y estabilidad en la economía nacional. Otros órganos reguladores son las comisiones encargadas de supervisar y vigilar a cada una de las entidades operativas, tales como: Afianzadoras, Aseguradoras, Afores, Bancos, Casas de Bolsa, Fondos de Inversión, entre otras; cada una de ellas atiende a un sector en específico y regularmente nos encontramos vinculados con ellas de una forma u otra.

Conocer más sobre el SFM es fundamental para contar con una buena educación financiera, equiparable incluso con una cultura de prevención; ya que en muchas ocasiones su desconocimiento ha sido causa de grandes pérdidas económicas, un ejemplo de ello, es el crac de la Bolsa en 1987, calificado por muchos expertos como el episodio más triste del gremio bursátil en México.

Durante los nueve meses previos al gran desastre, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores, tuvo un desempeño sobresaliente con rendimientos cercanos al 690 por ciento, esto llamó la atención de propios y extraños, tanto que se invirtieron grandes cantidades de capital. Frente a este fenómeno, la extinta Comisión Nacional de Valores (hoy Comisión Nacional Bancaria y de Valores), abrió los parámetros para que todo tipo de personas pudieran invertir, por lo que pequeños inversionistas se aventuraron y pese a no contar con conocimientos acerca del riesgo de invertir en el Mercado de Valores, decidieron arriesgar todos sus ahorros, sueldos, hipotecas y demás. 

El 19 de octubre de 1987 los Mercados financieros internacionales sufrieron un desplome, con epicentro en Nueva York. La caída en México se prolongó a lo largo de un trimestre, la pérdida total del IPC fue de 74.42 por ciento; la gente que había invertido todo en los últimos meses quedó en bancarrota y así, sin dinero, tuvieron que enfrentar la severa crisis inflacionaria por la que atravesó el país.

Podríamos atribuir a este hecho, a la actual resistencia de la sociedad mexicana para invertir en acciones de la Bolsa, aún y cuando se ha demostrado que en el largo plazo los rendimientos en el Mercado de renta variable son mayores a sus pérdidas.

Unos años más tarde, entre 1994 y 1995, el SFM se vio dotado de mayor solidez, con el decreto de la autonomía de Banxico, cuyo principal objetivo sería procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional. Además, para atender la acelerada expansión del Sistema Financiero, producto del nuevo modelo económico, se conformó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Más adelante, en los primeros meses de 1995 Banxico y la CNBV enfrentaron su primer gran reto, uno de los tragos más amargos que la economía mexicana haya pasado en su historia, una profunda devaluación del peso provocó pánico en los Mercados financieros internacionales y terminó por afectar a economías emergentes y desarrolladas, posteriormente este hecho fue conocido mundialmente como ”El efecto tequila”.

Con la nueva crisis vino el desempleo, por lo que la gente no tenía dinero para pagar los créditos que habían adquirido con anterioridad y de manera abrupta se elevaron las tasas de interés. Esto provocó un aumento en las carteras vencidas y como consecuencia muchos Bancos quebraron, lo que terminó dañando gravemente al Sistema Financiero.

De los errores debe aprenderse, por eso es importante conocer más sobre el SFM, de los hechos y acontecimientos que lo han moldeado, con el objetivo de prevenir nuevas crisis.

Con respecto a esto último, recientemente ante la contingencia por el nuevo Coronavirus (SARS-Cov2) y el panorama mundial nada alentador, Banxico inyectó liquidez el Mercado aportando 750 mil millones de pesos para apoyar a pequeñas y medianas empresas (PyMEs), a través del otorgamiento de créditos bancarios.

Cabe destacar que la economía nacional es impulsada principalmente por las PyMEs, pues aportan más del 80 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y generan más de 10 millones de puestos de trabajo. Si bien, esta no es la única medida que debe tomarse, se está tratando de atender a través de uno de los sectores más fortalecidos de la economía, el SFM.

Muy probablemente alguno de los lectores se encuentre relacionado con los temas que hemos tocado, ya sea por una experiencia con inversiones en el Mercado de Valores, a través de una PyME o de un crédito, sea cual sea la manera, todos en algún momento de la vida hemos tenido un acercamiento a las instituciones que conforman al SFM; sin embargo, parte de las decisiones que tomamos dependen en gran medida de la educación financiera y nuestro conocimiento sobre ella, pues sin pretenderlo, la economía personal es la base de la economía nacional.


Fuente:

  • Álvarez M. (2019, 23 de mayo). En 1987 México enfrentó un terrible crack financiero. Mercados Excélsior. https://bit.ly/2WuVn5K  
  • Banco de México. Banco de México: 25 años de autonomía, transparencia y   confianza. Consultado el 11 de mayo de 2020. https://bit.ly/2zBHbhY 
  • Comisión Nacional Bancaria y de Valores. CNBV conmemora 25 años de su creación. Consultado el 11 de mayo de 2020. https://bit.ly/3bvJssi 
  • Ffrench-Davis, R. (1999). Macroeconomía, Comercio y Finanzas para Reformar las Reformas en América Latina. McGraw- Hill Interamericana. https://bit.ly/3fHW5UC 
  • Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Catálogo del Sistema Financiero Mexicano. Consultado el 11 de mayo de 2020. https://bit.ly/2Z6TJbQ 

6 comentarios

  1. Me agradó mucho conocer cómo el sistema financiero mexicano está presente en acciones tan cotidianas de nuestra vida, y conocer algunas de las que te ofrecen respaldo tales como la CONDUSEF.

    1. Author

      Juan, como bien mencionas el Sistema Financiero se hace presente en muchas de nuestras actividades diarias, de ahí la importancia de conocerlo. Gracias por leernos.

  2. Creo que es necesario el fortalecimiento de la educación financiera en nuestra sociedad, pese a que todos estamos inmersos de una u otra forma en el Sistema Financiero Mexicano, existen un gran desconocimiento al respecto del cual deviene la apatía. Me gustó el artículo, contiene un lenguaje muy digerible y me invita a conocer más al respecto. En hora buena!

    1. Author

      Isaac, Bursatron es una empresa que precisamente ha identificado esta área de oportunidad y tratamos de poner nuestro granito a través de herramientas como el presente blog. Gracias por leernos.

  3. Que gran artículo, este tema me pareció muy interesante ya que creo importante el hecho de conocer las instituciones reguladoras de nuestras actividades financieras. Muchas veces aunque hemos oído hablar de ellas, no sabemos realmente a que se dedican y en lo que nos pueden ayudar.

    1. Author

      Zyanya; la difusión de la educación financiera es nuestro objetivo, principalmente por motivos parecidos a lo que mencionas. Existen autoridades que ni siquiera sabemos que existen y pueden sernos de mucha ayuda en algún momento de nuestra vida. Te invito a continuar leyéndonos para obtener más información.

Responder a BLOG Bursatron Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *